La asistencia regular a la escuela es esencial para el éxito de los estudiantes y es una responsabilidad compartida por las familias, las escuelas y la comunidad en general. En Hawái, la asistencia a la escuela está regida tanto por la ley estatal como por la política de la Junta de Educación, que enfatizan la importancia de mantener a los estudiantes interesados en el aprendizaje desde una edad temprana. Estas pautas garantizan que los niños de 5 a 17 años asistan a la escuela regularmente, lo que ayuda a construir una base sólida para su futuro.
“A menos que sean excluidos de la escuela o exceptuados de asistir, todos los niños que hayan llegado a la edad de al menos cinco años el 31 de julio del año escolar o antes, y que no hayan llegado a la edad de dieciocho años, para el 1 de enero de cualquier año escolar, asistirán a una escuela pública o privada durante el año escolar, y cualquier padre, tutor u otra persona que tenga la responsabilidad o el cuidado de un niño cuya asistencia a la escuela es obligatoria enviará al niño a una escuela pública o privada”.
“El Departamento hará todos los esfuerzos posibles para garantizar y hacer cumplir la asistencia escolar obligatoria de los estudiantes de conformidad con la ley de asistencia obligatoria”.
El ausentismo crónico se define como faltar a clases 10% o más durante el año escolar por cualquier motivo, justificado o injustificado, y puede ocurrir con tan solo dos días de ausencia por mes. Ausentarse con frecuencia de la escuela puede obstaculizar significativamente la capacidad de un estudiante para dominar el material del nivel de grado. La asistencia regular permite a los estudiantes mantenerse al día con el trabajo del curso y participar plenamente en las actividades del aula.
Los estudiantes que tengan más de 18 ausencias injustificadas y no hayan respondido a las intervenciones de la escuela pueden ser remitidos al Tribunal de Familia. El Tribunal de Familia puede poner a un niño bajo jurisdicción por ausentismo escolar si el niño no asiste a la escuela o no recibe los servicios educativos requeridos por la ley.